Armas de custodios fueron usadas en la masacre de Torreón: PGR
Ciudad de México.- Los responsable del asesinato de 17 jóvenes en la Quinta Italia Inn, en Torreón, Coahuila, eran presuntos reos del Cereso número 2 de Gómez Palacio, Durango, a quienes las autoridades les permitían salir en las noches y utilizar vehículos y armas oficiales para ajustes de cuentas, informó hoy la Procuraduría General de la República.
Los reclusos, con la autorización de la directora del Cereso, Margarita Rojas Rodríguez, salían por las noches para cumplir venganzas por encargo, utilizando vehículos oficiales para su traslado y ocupando las armas de los custodios para las ejecuciones, explicó Ricardo Nájera, vocero de la PGR.
“Los delincuentes cumplían sus ejecuciones como parte de ajustes de cuentas contra integrantes de miembros de bandas vinculadas con la delincuencia organizada. En dichas ejecuciones también asesinaron cobardemente a civiles inocentes”, señaló.
De acuerdo con investigaciones de la dependencia, se utilizaron cuatro armas tipo AR-15 calibre.223, en la masacre de Torreón, mismas que pertenecían a custodios del Centro de Readaptación de Durango.
Estas mismas armas, informó la PGR, fueron utilizadas en las ejecuciones del bar “Ferri”, ocurrido el 1 de febrero, y en el bar “Juanas” ocurrido el 15 de mayo, ambos también en la ciudad de Torreón.
La PGR informó que ya rindieron su declaración ministerial y se les dictó un arraigo a 20 días a Margarita Rojas Rodríguez, directora del penal, Roberto Enríquez Aguayo, jefe de seguridad y vigilancia, Francisco Carlos Alberto Uranga Orona, subdirector, y José Guadalupe Rivas Ordaz, jefe de seguridad y vigilancia.
De acuerdo con la Procuraduría, ya han declarado todos los custodios y más de la mitad de los reclusos del Cereso.
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Ciudad de México.- Los responsable del asesinato de 17 jóvenes en la Quinta Italia Inn, en Torreón, Coahuila, eran presuntos reos del Cereso número 2 de Gómez Palacio, Durango, a quienes las autoridades les permitían salir en las noches y utilizar vehículos y armas oficiales para ajustes de cuentas, informó hoy la Procuraduría General de la República.
Los reclusos, con la autorización de la directora del Cereso, Margarita Rojas Rodríguez, salían por las noches para cumplir venganzas por encargo, utilizando vehículos oficiales para su traslado y ocupando las armas de los custodios para las ejecuciones, explicó Ricardo Nájera, vocero de la PGR.
“Los delincuentes cumplían sus ejecuciones como parte de ajustes de cuentas contra integrantes de miembros de bandas vinculadas con la delincuencia organizada. En dichas ejecuciones también asesinaron cobardemente a civiles inocentes”, señaló.
De acuerdo con investigaciones de la dependencia, se utilizaron cuatro armas tipo AR-15 calibre.223, en la masacre de Torreón, mismas que pertenecían a custodios del Centro de Readaptación de Durango.
Estas mismas armas, informó la PGR, fueron utilizadas en las ejecuciones del bar “Ferri”, ocurrido el 1 de febrero, y en el bar “Juanas” ocurrido el 15 de mayo, ambos también en la ciudad de Torreón.
La PGR informó que ya rindieron su declaración ministerial y se les dictó un arraigo a 20 días a Margarita Rojas Rodríguez, directora del penal, Roberto Enríquez Aguayo, jefe de seguridad y vigilancia, Francisco Carlos Alberto Uranga Orona, subdirector, y José Guadalupe Rivas Ordaz, jefe de seguridad y vigilancia.
De acuerdo con la Procuraduría, ya han declarado todos los custodios y más de la mitad de los reclusos del Cereso.
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